Siempre se
mostró atraída hacia las compras sin sentido, esto incluía las rebajas.
Se
estudiaba los catálogos al detalle. Dominaba el arte del llévese dos y pague uno,
el tres por dos, las compras a mitad de precio, las muestras gratuitas y las
ofertas de lanzamiento, pero con la última que hicieron, anunciada a
bombo y platillo en los medios, la segunda unidad al setenta por ciento de
descuento, cree que la tomaron el pelo.
El rubio
ha salido obediente, cariñoso y educado, pero el otro, el moreno, el de los ojos
azules, va a acabar con sus nervios.



