miércoles, 1 de enero de 2025

SOLUCIONADO EL DILEMA


 

Le resultó difícil de explicar, pero se arriesgó y tomó partido sin dudar.

Se dirigió al corral, cogió un huevo recién puesto, no sin levantar un gran revuelo entre el animalario. Después tomó unas patatas y una cebolla del huerto, aquí no hubo revuelo, como resulta obvio.

Colocó las viandas sobre la mesa con parsimonia y sin orden, también acercó el cuenco de la sal y la grasienta aceitera. Entonces, en un acto solemne y antes de colocar la sartén en el fuego, cogió el huevo aún caliente y lo elevo a las alturas sin perderlo de vista y con una imperativa energía dictó la siguiente sentencia: “Eureka, por fin aclaré el eterno dilema, primero la gallina y después el huevo”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario