viernes, 6 de mayo de 2022

INDIFERENCIA


Indiferencia: estado de ánimo que se caracteriza por una ausencia total de rechazo o agrado hacia una persona, objeto o circunstancia

Asaltado por la indiferencia. En La noche del 19 de enero de 2022 France Info TV da la noticia: el fotógrafo René Robert, murió solo en una concurrida calle de París sin que nadie se detuviera a socorrerlo...y lo que este trágico y repugnante final de vida nos enseña sobre nosotros mismos (Michele Mompontet)



Era un día, como otro cualquiera
uno más a tachar de su lista
se levantó temprano,
 despierto ya lo estaba, rato hacía
hizo la cama, como cada día
almorzó escaso, tenía desgana
sentía mareos, alguna molestia
sin importancia o eso creía.
.
Se encerró en el cuarto oscuro
manipulando unos negativos
un encargo de última hora
a su edad, eso le tenía entretenido
luego a la tarde, haría la entrega
a la caída del sol o eso creía.
 
Comió sin ganas, lo justo
estiró las piernas y quedó dormido
estuvo así un rato largo
hasta que le despertó un ruido
aprovechó la coyuntura
y fue a preparar el encargo
para su entrega o eso creía.
 
Salió de casa, sin prisa
andando lento, avanzaba despacio,
casi sin  ganas, cansado
la cara pálida, los ojos distraídos
el sombrero de lado,  medio caído
la barba rala, descuidada
“haberte quedado en casa”
“para que habré salido”, repetía
pensaba tardar poco o eso creía.
 
Y sin saber cómo, se vio caído
en el suelo, sobre la acera,
en una concurrida avenida
la consciencia dándole la espalda
sin fuerzas de articular palabras
recuerda haber estirado el brazo
pedir auxilio balbuceando algo,
y se fue al otro mundo
aterido de frío, congelado
y la gente pasando a su lado
sin percatarse de su estado
y aquí acaba esta historia,
asaltado por la indiferencia
siendo el final la única verdad
lo demás es ficción, inventado.
 
 
***

6 comentarios:

  1. Como somos los humanos
    Penosos . Ya lo vivimos co Gaudí

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  2. Me gusta cómo has narrado la última jornada. Aunque inventada, bien podía ser completamente real.
    Enhorabuena Alfredo!
    Y lástima de nosotros humanos que nos hemos deshumanizado

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