miércoles, 18 de junio de 2025

EL LAPICERO QUE DIBUJABA SIN PUNTA (Microrrelato hasta 100 palabras)


 CONCURSO RELATOS EN CADENA

Dibujó un ataúd pequeño y se metió dentro, pero se dejó el lapicero fuera. Alguien lo encontró brillando en el suelo y comenzó a utilizarlo.

Primero dibujó una flor y su aroma cubrió la atmósfera de primavera. Asombrado con el resultado dibujó un árbol repleto de pájaros. Al instante empezó a llenarse de frutos y a oírse los trinos.

Creyó que podría dibujar un mundo mejor y fue a buscar a los fabricantes de odios y les dibujó una bilis buena y a las armas de guerra un nudo en los extremos.

Cuando hubo dibujado un montón, se paró a sacarle punta al lapicero y continuó imaginando cosas.

martes, 10 de junio de 2025

EL TABACO MATA (Microrrelato hasta 100 palabras)


 CONCURSO RELATOS EN CADENA

Jugó a dibujar figuras de humo, mientras barajaban las cartas. Apiló las que le tocaron en suertes.

 Mirándolas de reojo apostó lo que le quedaba, incluyendo unos pagarés. Solo él sabía que no tenían fondos.

Mientras le tocaba el turno, se dirigió al excusado; sentándose en la taza, apoyó la cabeza en una de las paredes y con un cúter sajó la muñeca de su mano derecha, la misma que había sujetado la mala suerte momentos antes.

Sobre la mesa de juego, una densa nube de humo de una última calada dejaba entrever la figura de un encapuchado asido a una guadaña de grandes dimensiones.


jueves, 5 de junio de 2025

VISITA INESPERADA (Microrrelato hasta 100 palabras)


 CONCURSO RELATOS EN CADENA


Sabía a soledad, pero también a paz. Había pasado tanto tiempo desde la última orgía que casi lo había olvidado

Apenas recibía visitas. Durante el día, permanecía oculto en los bajos de su castillo, pero la noche le daba nuevos bríos. Paseaba sin miedo por las estancias, a la tenue luz, casi apagada, de unas derretidas velas.

Esa noche unas turistas francesas, tan osadas como perdidas, llamaron a su puerta.

“Por fin volveré a sentir paz”, pensó.

Se dirigió hacia la puerta ciñéndose una enorme capa de terciopelo negro y cuello vuelto, de color rojo.

Una leve sonrisa dejó al descubierto el brillo de dos afilados colmillos.