Andaba yo contando mis
dineros
con mis cosas, haciendo
inventario
conseguido con esfuerzo y
trabajo
dicho sea de paso, sin
otro argumento,
teniendo como tengo dos miembros
gracias a Dios, una a
cada lado
¿Por qué disfrutando lo
arriba detallado
he de dar la espalda a
una de las manos?
¿Por qué tengo que ser
azul o rojo
según tenga la alforja
llena
o vacía de viandas y alimentos?
reescribiendo el cuento
de la lechera
recogiendo premios,
cosechando fama
realizando conjeturas,
haciendo cábalas
yo que siempre había
construido castillos,
de naipes u otros
materiales blandos
la palabra excusa no
entraba en mi ideario
siendo como era un macho
alfa
pasé de guinda de pastel
a bizcocho cubierto
sintiéndome obstáculo,
vencido y relegado
no tengo excusa para seguir
guerreando
si me quedo, seguiré recibiendo
palos
así que decido abandonarlo
todo
claro está que no me voy
descalzo,
pero hay quien dice que
soy un cobarde
por no seguir en primera línea,
luchando,
elija la decisión que sea
me criticaran por haberme
equivocado.
actuado, mejor definido
las estadísticas según sea
el bando
habrán acertado, los que
han ganado,
otros, la mayoría, menudo
fracaso,
los perdedores ni a ellas
se han acercado,
aunque todos sacaran
pecho
se sacudirán el polvo
y a devanarse los sesos
urdiendo
el slogan de la siguiente
convocatoria
como si nada hubiera
pasado,
felicitar al ganador por
los resultados
y a partir de mañana, otra
vez al ruedo,
a sacarnos los ojos,
a gritar más que el
contario,
y a llevar menos razón que
un santo.
***
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